Radio Tanga: Episodio 009 – Formas de alcanzar el orgasmo

Consulta #1

Hola Lic, antes que nada gracias!

Me preocupa que puedo llegar al orgasmo solo de una manera cuando tengo sexo (yo abajo y un movimiento de Mi pareja muy específico), o con la masturbación pero también de una manera especifica casi sin contacto con nada, yo boca abajo y frotando apenas con almohada o a veces sin otro elemento que la cama misma.

Me genera molestia no llegar al orgasmo de otra manera a pesar de haber intentado, mi pareja y yo tenemos altas previas mucho estímulo, pero no puedo llegar. Disfruto tanto que hasta me olvido que no voy a llegar, o sea que no estoy pensando constantemente en acabar, pero no pasa!

No quiero seguir insistiendole en que no puedo llegar porque se obsesiona más que yo.

Consulta #2

Hola Lic! Ante todo, sos una genia y me encanta tu contenido.

Mi duda o inquietud es, desde que empecé a tener relaciones nunca pude acabar con mi pareja, básicamente porque estoy acostumbrada a hacerlo de una manera particular cuando me masturbo sola. Con un otro el estímulo es muy placentero, pero nunca llega al orgasmo. Qué se puede hacer para cambiar eso? 

Saludo

Consulta #3

Hola lic mi consulta es que llego al orgasmo solo con masturbación y en gral en una pose determinada, frotándome con algún mueble o punta de la cama. 

Nunca pude lograrlo cuanto estoy con otra persona por más buena relación que tenga. No me animo a hacer eso que hago cuando estoy a solas, por más confianza que tenga lo siento algo muy mío y muy íntimo. Intente tocarme de otras maneras, pero no logro el mismo nivel de intensidad, desde que me acuerdo que es así…

Formas de alcanzar el orgasmo

Cuando hablamos de orgasmo yo noto que hay un cambio que se dio en los últimos años. Antes la primera consulta sobre orgasmo era sobre mujeres que nunca lo han tenido, pero lo que observamos ahora son un montón de consultas que tiene que ver con las variaciones orgásmicas o dificultades situacionales. El aumento de la masturbación nos presenta este panorama, y el aumento del uso de juguetes, por ejemplo, nos presenta también el mismo panorama, llego pero de esa manera, cuando antes ni se llegaba.

 

Refiriéndome al tema de la masturbación me voy a basar en un estudio hecho en Portugal y publicado en el año 2015. El objetivo de ese estudio fue explorar la edad de inicio y la frecuencia de la masturbación, las emociones asociadas y la relación entre frecuencia de la masturbación y diferentes factores de comportamiento sexual. Las participantes fueron 3.687 mujeres entre 17 y 75 años que completaron una encuesta online.

Los resultados revelan:

• Que se masturbaron en algún momento de su vida (91%), durante el último año (87,8%) y dentro del mes anterior (63% ).
• El comportamiento de masturbación parece estar relacionado con un mayor repertorio sexual, más fantasías sexuales y una mayor facilidad informada para alcanzar la excitación sexual y el orgasmo. Es decir, que tocarse mejora la excitación, el orgasmo y nos conecta con las fantasías dándonos mayor creatividad.
• Los resultados aún revelaron una minoría de mujeres que informaron sentir vergüenza (15,4%), culpa (10,3%) y sentirse ridículas (9,1%) durante la masturbación. La vergüenza era más común entre las mujeres jóvenes, en el grupo de edad de 17 a 26 años. Los resultados revelaron un ligero aumento de la culpa y una disminución de la vergüenza en los grupos de edad, excepto en el grupo de edad de 47 a 56 años. Es interesante que en este segmento de edad se observe el mayor porcentaje de bienestar reportado y los niveles más bajos de esas emociones negativas.
• Respecto de la edad de inicio: la experiencia temprana de la masturbación podría ser beneficiosa para la excitación sexual y el orgasmo en la edad adulta. Casi la mitad de las mujeres recuerda haber comenzado a masturbarse entre los 10 y los 14 años, y el 36% entre los 15 y los 19 años.
• Además, este estudio demuestra que la masturbación es un componente positivo en la estructuración de la sexualidad femenina.
• La mayor frecuencia informada de masturbación se asoció con niveles más altos de iniciación de las relaciones sexuales, prácticas de felación y cunnilingus, excitación sexual inesperada y frecuencia de fantasías sexuales. Esto quiere decir que la masturbación es un facilitador de la respuesta sexual.
• La práctica de la masturbación también se asoció con menos dificultad en la excitación sexual y menos inhibición sexual.

Algo que me interesa visibilizar son los tiempos. Muchas veces cuando consultan por dificultades orgásmicas, la persona te relata que intenta tocarse pero que no llega. Cuando preguntas cuanto tiempo se tocan, se quedan pensando. Es tal la ansiedad y la presión, que por lo general no nos damos el tiempo suficiente. Apresurarse atenta contra el orgasmo, tanto en hombres como en mujeres.

 

Además, este estudio indica que el 65 % de las mujeres de la muestra informaron que tardaban menos de 15 min en masturbarse hasta el orgasmo, el 32,1 % tardaba entre 15 y 30 min, el 2,6 % tardaba entre 30 y 60 min y el 0,3 % tardaba más de 1 hora. Esto demuestra que los tiempos pueden ser variados en cada persona.

¿Cuáles son las formas en que estas mujeres se masturban?

• El principal método informado fue la estimulación directa del clítoris, el cual fue utilizado por la mayoría (86,8%) de las participantes.
• El chorro de agua que sale de la ducha (22,9%).
• Otros métodos incluyen la inserción de vibradores o algo en la vagina (21,4%).
• A pesar del elevado número de mujeres que se tocan directamente el clítoris, todavía queda una proporción de mujeres que no se tocan los genitales para masturbarse, utilizando otras formas de estimulación del clítoris como apretar los muslos (9,3 %) o presionar los genitales con almohadas (16 %).

Lo que hay para pensar y preguntarnos, en el caso de que necesites usar un elemento externo q no sean tus manos, es que si tiene que ver con las características del objeto, por ejemplo porque es algo duro entonces me puedo friccionar mejor, o tiene que ver con que si me toco la vulva con mis manos me da asco. Depende de con qué se relaciones va a influir en lo que se puede hacer al respecto. Si tiene que ver con las características del objeto, bueno es el tipo de estímulo que necesitas. Si tiene que ver con el asco y el rechazo podemos trabajar esas emociones asociadas.

Lo que dice este estudio es que los investigadores refieren que, en la práctica clínica, se han observado que algunas mujeres pueden llegar al orgasmo sólo durante la masturbación, sin tocarse y luego no son capaces de reproducir la misma forma de llegar al orgasmo con la pareja, lo que provoca una enorme frustración. Es decir que no hay estudios hechos específicos, pero sabemos que pasa.

Los hábitos de masturbación que implican tensión muscular, como apretar los muslos o presionar los genitales contra almohadas o muebles, parecen estar asociados con más dificultades para alcanzar el orgasmo en el sexo en pareja.Algunas mujeres alcanzan el orgasmo predominantemente a través de la contracción muscular continua, a menudo juntando las piernas o presionando los genitales contra objetos. Otros se condicionan al roce del clítoris con el cuerpo inmovilizado, utilizando también la tensión muscular continua.Si bien estas técnicas son muy efectivas en el sexo en solitario, pueden limitar la experiencia del placer y el orgasmo en el coito vaginal.

Entonces sabemos que masturbarnos es positivo y se asocia con una mejor capacidad orgásmica. Sabemos que es algo frecuente que necesitemos tocarnos y que necesitemos de una manera específica de estímulo para disparar el orgasmo. ¿Por qué entonces es motivo de malestar y creemos que nos hace defectuosas?

 

Todas las personas tenemos un umbral de estímulo necesario para disparar el orgasmo y este es variable. También puede haber algo mental, quizá me disperso más entonces necesito estimulo más intenso que necesita menos tiempo y menos concentración mental.

Hay personas que necesitan más intenso, otras menos. Otras de hecho son hipersensibles y ante el menor roce se dispara. Esto pasa tengas vulva o pene. A veces necesitamos del estímulo directo e intenso sobre el clítoris, por ejemplo con un duchador. A veces necesitamos estímulo indirecto del clítoris, por ejemplo apretando las piernas o frotando desde el monte de venus. A veces necesitamos mucha tensión muscular de las piernas, con piernas estiradas o piernas bien apretadas. A veces necesitamos una intensa fricción del clítoris, ya sea contra el colchón boca abajo, ya sea estando arriba en posiciones sexuales permitiendo friccionar contra el cuerpo de la otra persona sea varón o mujer, o con las dos personas sentadas.

Todo esto es normal. Pero qué pasa cuando quiero llevar esa forma a un encuentro. ¿Me da pudor? ¿Me cuesta tomar la iniciativa? ¿Me siento que no es normal?

Y sobre todo…en un encuentro heterosexual, ¿qué suele predominar?

Insisto, esta necesidad de un estímulo disparador te puede pasar tanto tengas pene como tengas vulva, solo que en primer lugar, por lo general las prácticas sexuales heterosexuales suelen estar orientadas al placer masculino, por lo cual no es tan raro que el hombre lleve la situación hacia la forma y hacia la práctica que le hace disparar el orgasmo. Esto está normalizado y aceptado, sin embargo, cuando es una mujer aparecen estos comentarios: es complicado, es incómodo, no se cómo hacer, mi pareja no lo entiende, me dice que no es normal.

Estoy hablando de que hasta nos cuestionamos si está mal que durante el encuentro heterosexual la mujer tenga que estimularse el clítoris con la mano. Esto muchas veces se vive como algo que no debería pasar.

Pero la pregunta entonces es por qué no podemos realizar la estimulación que necesitamos. Quien dice que debería ser de una manera. Podemos hacer todo lo que queremos hacer y recurrir a nuestro modo orgasmo cuando queremos llegar. La gran mayoría de personas llega al orgasmo de la misma manera.

Para el hombre es más fácil, porque las prácticas de penetración permiten un estímulo directo de fricción contra el glande de su pene de manera constante. Nosotras necesitamos esa misma estimulación sobre nuestro glande del clítoris, que en penetraciones si no tengo la vulva pegada contra algo, no sucede.

Consulta #4

Hola lic. Buen día, mi nombre es xxx, tengo un problemilla, jamás tuve un orgasmo sin masturbarme, y aunque disfruto muchísimo del sexo con mi pareja (y anteriores) jamás pude alcanzar un orgasmo sin la intervención de mis manos (cosa que solo hice un par de veces). 

Me frustra un poco porque muchas veces con mi pareja actual sentía que venía el orgasmo pero no sucede y terminaba fingiendo muchas veces, y realmente quisiera experimentarlo aunque sea una vez y que mi novio sea parte de ello. 

Gracias!

Tu pareja es parte de eso simplemente por el hecho de estar en la cama con vos. Uno se puede tocar a uno mismo y que la otra persona solo te mire, y no solo puede ser super excitante, sino que además es compartido. Tiene que ver con buscar complicidad en lugar de competencia. Tiene que ver con comprender el tipo de estimulación que necesitamos.

Sin estimulación del clítoris no hay orgasmo. La forma más fácil de estimularlo probablemente sea con tus manos.

Consulta #5

Hola doc! Mi nombre es (..). Nunca logré el orgasmo por penetración. Desde adolescente me masturbo y no sé si tiene que ver con eso, que me mal acostumbré. Pero a la hora de estar con alguien no me genera nada solo la penetración y quiero acompañar tocándome, pero es complicado, incómodo tocarse así y nunca llego. No sé qué hacer.

Para que los encuentros heterosexuales, pueden plantear otras prácticas y no exclusivamente la penetración, o formas de penetración más acorde al placer de la mujer, nos falta un largo camino. Tiene que llegar más información, tiene que haber más diálogo y tenemos que trabajar sobre el consumo de porno mainstream.

Sabemos que los encuentros sexuales en vínculos heterosexuales se centran en la penetración. Históricamente nos dijeron que debíamos tener un orgasmo en penetración, también llamado orgasmo vaginal. Hasta nos hicieron creer que es una forma más madura de tener placer. Esto no es cierto, y la razón más frecuente de falta de orgasmos en mujeres durante sus encuentros sexuales tiene que ver con la falta de estimulación adecuada durante el tiempo suficiente.

La ocurrencia del orgasmo durante el coito difiere entre hombres y mujeres, con casi el 100% de los hombres adultos reportando haber experimentado un orgasmo durante el coito y durante la mayoría de los actos sexuales. Un porcentaje mucho menor y más variable de mujeres reporta haber experimentado un orgasmo durante el coito, y un porcentaje aún más pequeño reporta experimentar el orgasmo de manera rutinaria durante el coito. Por el contrario, prácticamente no hay diferencia de sexo biológico en la ocurrencia del orgasmo durante la masturbación, con más del 95% de hombres y mujeres experimentando de manera confiable el orgasmo durante la masturbación. Esto es lo que se conoce como la brecha orgásmica.

Una explicación potencial para esta diferencia sexual en el orgasmo durante el coito, pero no durante la masturbación, es que la estimulación durante el coito refleja la estimulación que los hombres usan con más frecuencia durante la masturbación, pero no para las mujeres. El glande del pene en fricción contra las paredes vaginales (o anales u orales) mientras que el clítoris está al aire. Lo que sucede es que durante los encuentros heterosexuales es muy difícil que la mujer encuentre la forma de estimulación de su clítoris y de su genitalidad de la manera en que lo consigue cuando está a sola. Además de un guion sexual donde prima el placer masculino, escasea el diálogo y se soluciona, muchas veces, fingiendo el orgasmo femenino.

Las cifras de mujeres que llegan al orgasmo en penetración van de un 40%, 1 de cada 5, o de un 10% si se considera que no tienen ningún tipo de estimulación más allá de la vagina. Lo cierto es que cuando decimos “orgasmo en penetración” no estamos detallando si en esa penetración tenemos estimulación del clítoris, si nos movemos, si apretamos el suelo pélvico, todas las cosas que ayudan al orgasmo y que vamos a ver. Decir “llego al orgasmo en penetración” sin detallar todo eso que sumamos quizá sea una frase que trae más confusión que claridad.

Entonces, es importante entender que la vagina está conectada hacia adentro con el suelo pélvico, hacia arriba con la uretra y hacia afuera con la vulva. Todo eso debemos activar para expandir el placer. A muchas personas también la estimulación de pezones les dispara el orgasmo, estando o no en penetración.

Además de nuestras maneras, hay que ver qué podemos hacer, qué suelen hacer las mujeres y qué cosas puntuales se saben que nos acerquen más al orgasmo, en penetración o en cualquier práctica sexual que involucre a otra persona.

Mover el tronco y la pelvis durante la actividad sexual parece facilitar la estimulación de las paredes vaginales, el complejo clitoridiano interno y los receptores de la musculatura pélvica que lo rodea, lo que reduce la necesidad de estimulación adicional del clítoris externo. Si bien también se producirá cierta estimulación de la glándula del clítoris durante el coito vaginal debido a la actividad muscular, el movimiento y la posición sexual, la vagina es un foco importante de estimulación.

Técnicas de las mujeres para hacer que la penetración vaginal sea más placentera

Identificamos cuatro técnicas previamente sin nombre, pero distintas, que las mujeres usan para hacer que la penetración vaginal sea más placentera: 1) Inclinación; 2) Balanceo; 3)Superficial; y 4) Emparejamiento.

1. Los datos sugieren que el 87,5 % de las mujeres hacen que la penetración vaginal sea más placentera usando «Angling»o inclinación: rotar, subir o bajar la pelvis/caderas durante la penetración para ajustar el lugar dentro de la vagina que frota el juguete o el pene y cómo se siente.
2. Aproximadamente el 76 % de las mujeres hacen que la penetración vaginal sea más placentera usando «Rocking» o balanceo: la base de un pene o juguete sexual roza contra el clítoris constantemente durante la penetración, al permanecer completamente dentro de la vagina en lugar de empujar hacia adentro y hacia afuera.
3. Usando ‘Shallowing’ o superficial: toque penetrante justo dentro de la entrada de la vagina, no en el exterior, pero tampoco en el interior profundo, con la punta de un dedo, un juguete sexual, la punta del pene, la lengua o labios.
4. Por último, el 69,7 % de las mujeres tienen un orgasmo más frecuente o hacen que la penetración vaginal sea más placentera utilizando «Emparejamiento»: cuando una mujer (Emparejamiento en solitario) o su pareja (Emparejamiento en pareja) se agacha para estimular su clítoris con un dedo o un juguete sexual al mismo tiempo mientras su vagina está siendo penetrada. Estos datos brindan técnicas que están a disposición de las mujeres para hacer que la penetración sea más placentera, lo que les permite identificar mejor sus propias preferencias, comunicarse sobre ellas y abogar por su placer sexual.

 

Bibliografía consultada

• Bischof-Campbell, A., Hilpert, P., Burri, A., & Bischof, K. (2019). Body movement is associated with orgasm during vaginal intercourse in women. The Journal of Sex Research, 56(3), 356-366.
• Carvalheira, A., & Leal, I. (2013). Masturbation among women: Associated factors and sexual response in a Portuguese community sample. Journal of Sex & Marital Therapy, 39(4), 347-367.
• Hensel, D. J., von Hippel, C. D., Lapage, C. C., & Perkins, R. H. (2021). Women’s techniques for making vaginal penetration more pleasurable: Results from a nationally representative study of adult women in the United States. PloS one, 16(4), e0249242.
• Shirazi, T., Renfro, K. J., Lloyd, E., & Wallen, K. (2018). Women’s experience of orgasm during intercourse: Question semantics affect women’s reports and men’s estimates of orgasm occurrence. Archives of Sexual Behavior, 47, 605-613.